Empresarios, funcionarios de organismos nacionales, legisladores, integrantes de organizaciones cannábicas, especialistas en derecho, economía y género del cannabis participaron este mediodía del II Congreso Internacional de Cannabis y Cáñamo, realizado en un colmado Salón Auditorio de la Cámara de la Mediana Empresa (CAME).

El discurso de apertura estuvo a cargo del anfitrión Jorge Pazos, secretario de Economías Regionales de CAME y de Leandro Ayala, presidente de la Confederación Cannábica Argentina -organizadora de la actividad-. Ayala destacó la importancia de la Ley 27.669 y pidió una regulación del cannabis de uso adulto que permita ampliar la generación de fuentes de trabajo e impulsar la actividad económica.

“Se ha colocado la piedra basal para poner en marcha la construcción de un proyecto cannábico en la Argentina, de un modelo productivo con valor agregado, con trabajo calificado, que muestra a las claras que no existe contradicción entre el agro y la industria, que la fusión y el trabajo conjunto de ambos sectores es una de las claves para transformar nuestro país”, remarcó Ayala.

“Queremos seguir trabajando, codo a codo, en la reglamentación de la ley y poner a disposición todos nuestros conocimientos, historia y energía para colaborar, asimismo, en la integración de la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal”, agregó. Acto seguido, convocó a “seguir consolidando este sendero de crecimiento y avanzar en la configuración y aprobación de un marco normativo para el desarrollo del cannabis recreativo en el país”.

Ley industrial

Luego de Ayala, el primer panel “Hacia un proyecto de cannabis y cáñamo nacional” abordó el espíritu y el alcance de la Ley 27.669. Allí participaron la diputada nacional del Frente de Todos, Mara Brawer y su par porteña Claudia Neira.

Brawer dio un panorama histórico sobre los avances normativos en Argentina y en el mundo e hizo un especial énfasis en la Ley 27.669 por los amplios aportes industriales que brinda el cáñamo industrial y sus beneficios para el desarrollo sustentable. “Son muchísimos los usos del cáñamo y con esta ley se abren camino para las PyMEs y las economías regionales”, remarcó.

A su vez hizo un párrafo aparte sobre la reglamentación de la Ley 27.669, demorada por los cambios de funcionarios en el Ministerio de Desarrollo Productivo. “La reglamentación va a priorizar las pequeñas empresas, las cooperativas y las economías regionales, para generar puestos de trabajo en las localidades y que los argentinos sigan viviendo en sus lugares, desarrollar la industria nacional y sustituir importaciones”, enumeró.

La legisladora habló también sobre el cannabis medicinal y la función del Estado para que los productos mejoren la calidad de vida de los usuarios. “Defendemos el rol del Estado regulando el uso medicinal para garantizar la trazabilidad de semillas porque hay patologías que necesitan determinados tipos de semillas”, puntualizó.

Por su parte, Claudia Neira dijo que el gobierno de la CABA se encuentra “en mora” por no reglamentar la Ley 6349 que aprobó la Legislatura porteña en diciembre de 2020, y pidió que el cannabis medicinal y terapéutico y sus derivados sean incorporados al sistema público de salud para reforzarlo. “La Ciudad no puede quedarse afuera de estos debates, más aún teniendo en cuenta el acumulado de capital que tiene con sus investigadores y universitarios, eso hay que ponerlo en valor”.

Derechos laborales y oportunidades para Argentina

En el segundo panel, titulado “Impactos locales y los posibles logros futuros” el abogado Piero Liebman, especialista en cannabis y cáñamo, pidió una regulación que “acompañe a los pequeños productores”, y enfatizó que deben ser trabajadores con derechos garantizados ya que han sido quienes desarrollaron el conocimiento sobre cultivo en todo este tiempo. “Necesitamos un marco regulatorio para la cadena de valor productiva del cannabis, que ya existe y viene funcionando hace muchos años con desarrollos y abasteciendo necesidades medicinales. Es una manera de capitalizar su conocimiento y también es un acto de soberanía que nos va a generar posibilidades a la hora de abrirnos al mundo”.

En tanto Mike Bifari, investigador y desarrollador de la industria del cannabis, destacó este tipo de eventos para “contrarrestar la estigmatización y los miedos a la planta”. Bifari habló de las diferencias entre el cannabis y el cáñamo. “Hablamos de una misma planta, las distinciones son por la paranoia con el efecto psicoactivo”, advirtió.

Además el especialista dijo que la “Argentina tiene una gran oportunidad” para el desarrollo del cáñamo por “sus estaciones bien marcadas, algo muy apto para la producción de cáñamo, a diferencia de Colombia, que con sus doce horas de luz y 12 de oscuridad es mejor para el cannabis medicinal”.

“Las inversiones tienen que salir del mercado interno, de los pueblos uniéndose en cooperativas agrarias y PyMEs”, continuó Bifari, y concluyó: “Se pueden hacer muchas inversiones con esta planta maravillosa”.

Cámara de growshops, turismo y medios de comunicación

El congreso tuvo representación de las provincias. El presidente de la Cámara de Cannabis Fueguina, Martín Ariznabarreta, dio los detalles del estado de situación de la industria cannábica de la isla, con especial hincapié en el turismo. “Estamos convencidos de que el turismo cannábico es parte de la industria cannábica. Para eso tenemos hotelería, gastronomía, logística y el punto más austral en la isla más linda del mundo”, recalcó.

El fueguino pidió también una regulación integral que incluya el uso adulto para “hacer crecer esta próspera industria”.

Alejandro Oviedo, oriundo de Bariloche y vicepresidente de la Cámara Empresarial de Grows Argentinos (CamEG), recientemente creada, reclamó que la reglamentación se haga “lo antes posible y con un enfoque de ayudar y generar todo lo necesario para que las PyMEs”. “Desde CamEG vemos que existe la necesidad de que los productores de pequeña escala tengan las mismas posibilidades que los grandes”, agregó.

En tanto el jefe de prensa de la Confederación Cannábica y editor de Industria Cannabis, Gabriel Murga, abordó el tratamiento que hacen los medios del cannabis. En esa línea cuestionó el “moralismo mediático” ante el uso adulto del cannabis y aseguró que “la comunicación es una herramienta clave para las discusiones del cannabis”.

Panelistas internacionales

El congreso cannábico incluyó también la participación de referentes internacionales, quienes hablaron de forma virtual: Juan Carlos Fischer, presidente de la Cámara Paraguaya de Cannabis Industrial y Henry Muñoz, abogado y empresario del cannabis colombiano.

Fischer valoró las instancias de formación y de encuentro que generan los congresos en la comunidad cannábica. “Es muy importante realizar estos eventos porque nos falta muchísimo por conocer de esta planta, que fue criminalizada durante muchísimos años. Por su parte, Muñoz dijo que “Argentina va a ser un líder, que está llamado a ser reconocido dentro de Latinoamérica”.