El Supremo Tribunal de Justicia de Brasil (STJ) permitió el cultivo de cannabis con fines industriales. Además, otorgó seis meses a la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) y al gobierno para regular la importación y cultivo de cannabis con bajo contenido de THC (hasta 0,3%).
El Tribunal de Casación de Brasil (STJ) ha decidido por unanimidad autorizar el cultivo de una variedad de cannabis destinada a la producción de productos industriales. Los jueces también otorgaron a la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) un plazo de 6 meses para definir las regulaciones relacionadas con la importación y cultivo de cannabis con bajo contenido de THC (tetrahidrocannabinol).
La decisión del STJ responde a una apelación contra un fallo del Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región (TRF4), que había rechazado una solicitud de una empresa de biotecnología para importar semillas de cáñamo industrial con fines comerciales. El TRF4 había considerado que la autorización para tales actividades correspondía exclusivamente al ámbito público y estaba fuera de la competencia judicial.
La jueza relatora del STJ, Regina Helena Costa, subrayó que la falta de regulación del cannabis industrial en Brasil representa una "restricción indebida al derecho fundamental a la salud". Costa destacó que la ausencia de normativas frena el desarrollo de un sector que podría generar empleos, promover la investigación científica y ofrecer tratamientos de bajo costo para los pacientes, contribuyendo así al cumplimiento de los derechos sociales garantizados por la Constitución.