El año 2022 comenzó con la confirmación de un nuevo proyecto de investigación y producción de cannabis, en este caso en la ciudad de Rosario. Investigadoras de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNR junto a la Asociación de Usuarios y Profesionales para el Abordaje del Cannabis (Aupac) avanzarán con un proyecto de evaluación y selección de cuatro variedades de Cannabis SATIVA L cultivadas por la organización cannábica y productores locales.

El objetivo de la iniciativa es inscribir las variedades en el Registro Nacional de Cultivares del Instituto Nacional de Semillas (Inase) que permita, además del derecho de propiedad, una genética probada que garantice trazabilidad y calidad para transferir a usuarios y cultivadores locales.

Como pasos previos, la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNR y Aupac se abocarán a plantar, evaluar y certificar las cuatro variedades. Realizarán los cultivos en los terrenos de la unidad académica de la localidad de Zavalla, en el departamento de Rosario.

Aupac, una asociación rosarina dedicada al acompañamiento clínico de pacientes y las capacitaciones de profesionales, aportará las variedades con las que trabaja. Por el lado de la Facultad de Ciencias Agrarias, las directoras del proyecto son Vanina Cravero e Ileana Gatti, docentes de esa casa de estudios que integran la cátedra Mejoramiento Vegetal y Producción de Semillas. También participarán investigadores e investigadoras del Instituto de Investigaciones de Ciencias Agrarias de Rosario (UNR-Conicet).

“Se trata de un proyecto de enlace social entre la Facultad de Agronomía de la UNR y AUPAC para el mejoramiento y el registro de cultivares de Cannabis. La propuesta es trabajar en conjunto con la casa de estudios sobre las variedades cultivadas por la Asociación y la comunidad cannábica local”, señalaron desde AUPAC en un comunicado. Por su parte, Gatti dijo a medios locales que se trata de “un primer paso muy importante porque el cannabis no solo tiene un uso medicinal probado sino que cuenta con aplicaciones en la industria alimenticia, textil y de la construcción”.

Las investigadoras buscan obtener 80 plantas de cada una de las cuatro variedades para la posterior evaluación del INASE. Además, posteriormente otro propósito es avanzar en cruzamientos con otras genéticas a partir del apoyo del Inase.

Este proyecto en la provincia de Santa Fe se suma a otro de distinto tipo encabezado por el Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF) del Estado santafesino. En octubre del año pasado lanzó un aceite de cannabis para la epilepsia refractaria, en base a materia prima importada y destinado a hospitales y centros de salud públicos, y a afiliados al Instituto Autárquico Provincial de Obra Social (Iapos).