El Instituto de Bioprospección y Fisiología Vegetal (INBIOFIV) de la Universidad Nacional de Tucumán es el segundo instituto del CONICET autorizado en Argentina para el estudio de la planta. El proyecto prevé la optimización de las condiciones de cultivo y la selección de las cepas de cannabis que tengan mayor potencial medicinal.
El Instituto de Bioprospección y Fisiología Vegetal (INBIOFIV), de la Universidad Nacional de Tucumán, comenzará los trabajos vinculados a su proyecto de investigación sobre cannabis medicinal. La iniciativa, aprobada por el Ministerio de Salud de la Nación a fines del mes de febrero, tiene que ver con el “Estudio químico, fisiológico y biológico de Cannabis sativa (var sativa y var indica) cultivadas en Tucumán, para la obtención de productos de uso medicinal”, como lo indica su título.
Con este marco, el INBIOFIV es el segundo Instituto del CONICET que está autorizado a estudiar la planta en Argentina y el primero en el norte del país. El instituto se dedica “al estudio interdisciplinario de especies vegetales de interés regional desde el punto de vista bioquímico, fisiológico, funcional y agroecológico” con el fin de aprovechar los recursos naturales de forma sostenible, así como “contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de la región”.
Entre los fines más destacados de la investigación, se le da relevancia a la optimización de las condiciones de cultivo de plantas de cannabis; esto es, la adaptación al clima, a los suelos, al agua y a la modalidad de cultivo. Se prevé que, luego de esa etapa, puedan seleccionarse las variedades medicinales que cuenten con un fuerte potencial terapéutico.
En tanto, otro de los pilares del proyecto llevado adelante por el INBIOFIV tiene que ver con los procedimientos de extracción, con hincapié en los principios activos de la planta y el análisis sobre las propiedades medicinales que estos tienen para diversas patologías y afecciones. El fin último es el desarrollo de productos medicinales seguros y de calidad.
El texto de la iniciativa había sido presentado al Ministerio de Salud de la Nación en el año 2018, cuando el INBIOFIV decidió comenzar una línea de investigación sobre la planta de cannabis. El desarrollo del mencionado proyecto podría significar el primer cultivo institucional de cannabis en Tucumán.
La institución se propone brindar capacitación sobre cannabis medicinal, cuestión que ya abordaron en 2020, cuando organizaron el primer curso de posgrado en cannabis medicinal en el NOA, al que asistieron profesionales de diversas provincias de nuestro país. Los temas trabajados se referían a la botánica de la planta de cannabis; el control de calidad del material vegetal con fines medicinales; el cultivo, la cosecha y el almacenamiento de cannabis medicinal; la preparación, estandarización y control de calidad de los bioproductos derivados; entre otros.
A su vez, otro de los objetivos del INBIOFIV es brindar servicios de control de calidad de productos de cannabis medicinal. Para eso, cuentan con un Servicio Tecnológico de Alto Nivel (STAN): ensayos, análisis, asesorías y/o consultorías institucionales, que cualquier empresa o institución pública o privada puede solicitar al CONICET. Para esto se utiliza el equipamiento, la infraestructura y los recursos humanos especializados de este organismo.