El objetivo de la iniciativa es la evaluación y selección de cuatro variedades de Cannabis SATIVA L cultivadas por la organización cannábica. Apuntan a inscribirlas en el Registro Nacional de Cultivares del Instituto Nacional de Semillas (Inase)
La empresa Agrogenética Riojana Sapem desarrolla un cultivo de caracterización de variedades para uso medicinal con más de 10.000 plantas que serán cosechadas en marzo de 2022. Luego, realizará la extracción y confección del primer aceite riojano, que se destinará a pacientes de la provincia. El proyecto abarca también el asesoramiento a privados para inversiones, la investigación, la formación académica y el turismo.
El presidente de la Cámara Argentina del Cannabis delineó cuáles son los principales desafíos de la industria para este año. Pidió que no haya demoras en Diputados para el tratamiento del proyecto de cannabis medicinal y cáñamo, y que se construyan criterios comunes al interior del Estado para la futura reglamentación.
La empresa realizó la siembra entre octubre y diciembre de 2021 de entre 8 mil y 10 mil plantas, y desde mediados de febrero avanza con la cosecha escalonada. Luego, junto con la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y el laboratorio de Ambiente de La Rioja continuará con la extracción y confección del primer aceite riojano. Los pacientes podrán acceder a través de un programa provincial y estará también a la venta en farmacias a precios accesibles.
Uno de los investigadores del proyecto de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) dio los detalles sobre las características de la CAT 3, variedad de semilla trabajada localmente por cultivadores que la semana próxima se encamina a ser la primera habilitada por el INASE para comercializar. Cómo podría favorecer al autocultivo y al cultivo de ONG, asociaciones, cooperativas y privados.
Rossana Nermi Zappia, referente del club de cultivo colectivo y solidario Jardín Unicornio, explicó cómo fue el recorrido para llegar a la elaboración de estas cepas y cuáles son sus características.
Se trata de un convenio entre la Municipalidad de Santa Rosa con la Cámara de Empresarios del Cannabis mendocina y la empresa SECBD S.A. El objetivo de los empresarios mendocinos es poder escalar la producción primaria y de productos derivados una vez que a nivel nacional el Congreso apruebe el proyecto de industrialización del cannabis medicinal y el cáñamo.
Se trata de un convenio de investigación y desarrollo de la planta de cannabis con fines médicos y científicos, en el que participan la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP y dos consultoras privadas. Apuntan a desarrollar un método de variables controladas que permita establecer parámetros de trazabilidad y calidad en los cultivos.
El ministro Matías Kulfas dijo que el cannabis medicinal es uno de los sectores claves para la producción de bienes y servicios ligados a la salud con el objetivo de “garantizar el acceso equitativo al sistema sanitario nacional”. Mientras que el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, sostuvo que el proyecto para industrializar el sector es una de las “nuevas actividades económicas” que permitirán aumentar la producción y crear nuevos empleos con un perfil federal.
La asociación Cultivo en Familia de La Plata y el club de cultivo Bien al Sur de la C.A.B.A remarcaron la importancia que representa la resolución 673. Reconocimiento por parte del Estado al trabajo de las asociaciones y nuevas posibilidades para expandir la producción y la provisión.
Los ministros Matías Kulfas, Carla Vizzotti y Daniel Filmus estuvieron en Chilecito junto con el gobernador Ricardo Quintela y el empresario Benjamín Enrici. Destacaron el proyecto de la empresa estatal y anunciaron convenios para transferir tecnología y potenciar las investigaciones. También destacaron las dos primeras variedades de semillas nacionales incorporadas al Registro Nacional de Cultivares.
El Director Nacional de Articulación Federal del Instituto Nacional de la Semilla (INASE), Gabriel Giménez, dialogó con Industria Cannabis sobre el recorrido para llegar a la inscripción de las dos primeras variedades en el Registro Nacional de Cultivares y sobre el potencial de la industria de la semilla cannábica en Argentina.